La experiencia
en elecciones pasadas, respecto a los “acompañantes del voto”, nos ha dejado
ingrata sensación sobre fraudes que realizan estos profesionales del
acompañamiento, al momento de asistir a las personas con discapacidad en su
acto de votación. Todos sabemos que parte de la estrategia negra de algunos
partidos políticos, es colocar personas en la puerta de los centros de
votación, con características de gente dulce, amable y con cara de yo no fui, a ofrecerse para
acompañar a adultos mayores o discapacitados al momento de la elección;
resultando que, generalmente estos “acompañantes” eligen por la persona
asistida sin importarle el gusto o la preferencia electoral del verdadero
votante, es decir de ese adulto mayor o de ese discapacitado. Estos
profesionales del acompañamiento, además de ser una especie de espías del
partido político que los contrató, constituyen una máquina de multiplicar votos
a favor de ese partido político o candidato contratante, porque, repito, suelen
votar y elegir por el discapacitado o por ese adulto mayor a quien acompañan,
sin ningún tipo de escrúpulos para favorecer a quien les paga para cumplir ese
objetivo.
El Consejo Nacional Electoral, consciente
de esta situación, ha establecido, dentro del marco del Reglamento General de la
Ley Orgánica de Procesos Electorales y en
vísperas de las próximas elecciones presidenciales, la normativa aplicable a
estos casos, previendo en sus artículos 290 y 291, que las electoras o
electores ejercerán su derecho al voto en forma individual y a fin de
garantizar ese derecho, los integrantes de la mesa electoral no permitirán que
la electora o elector esté acompañada o acompañado de otra persona durante el
trayecto comprendido entre el sitio donde se encuentran los integrantes de la
mesa hasta el lugar dispuesto para votar. No obstante esta norma tan clara y
contundente, el CNE estableció una excepción respecto a electoras o electores
con alguna discapacidad y/o analfabetas y/o los de edad avanzada, quienes podrán
solicitar ante el centro de información de su mesa correspondiente, que una
persona de su confianza los acompañe para ejercer su derecho al sufragio. En
caso que así sea, el CNE ha dispuesto una planilla, tipo acta, donde se dejara
constancia de esa situación y donde deben identificarse plenamente, tanto la
electora o elector, como su respectivo acompañante. Esa planilla o acta deberá
ser entregada en la mesa electoral y paso inmediato siguiente, esa electora o
ese elector podrá continuar con su proceso de votación.
También
regula el mencionado Reglamento General de la
Ley Orgánica de Procesos Electorales, que
en ningún caso se permitirá que una misma persona acompañe a más de una
electora o elector con discapacidad, analfabeta o de edad avanzada. Esto,
precisamente para evitar la proliferación de acompañantes de oficio, cuya tarea
es violar solapadamente la normativa electoral, cometer fraude en el proceso de
acompañamiento del elector mayor o discapacitado, y peor aún, decidir y elegir
por esta electora o elector incauto, quien confiado en esa persona con
apariencia de ovejita servicial, no es más que un lobo feroz con macabro fin de
beneficiar a un determinado candidato, cometiendo sin duda alguna fraude
electoral, tan grave que pudiera llegar a tener connotación penal. El próximo 7
de Octubre no se deje engañar. Si usted no puede valerse por si mismo para ir a
votar, ya sea porque no sabe leer ni escribir, tiene alguna discapacidad o
impedimento físico que le permita sufragar, o sencillamente por su edad
avanzada tiene dudas sobre el proceso de votación, entonces vaya acompañado de
una persona conocida, de su absoluta confianza y verifique junto a ella, que su
voto fue de acuerdo a su elección y preferencia, pero no deje de ir a votar. El
derecho al sufragio es uno de los mayores tesoros que la democracia nos brinda.
El próximo 7 de Octubre el héroe puedes ser tú.., el 7 de Octubre actívate,
participa y vota.
No hay comentarios:
Publicar un comentario